miércoles, 25 de junio de 2014

Carta a un/a conocido/a

Dirigido a ud, señor o señora, niña o niño que cruzó en la calle mientras camino: 

                                         Caminamos a veces con rumbo, a veces sin, caminar por caminar. Pensando en nuestras cosas, en nuestros problemas, enfrascados en nuestros mundos... muchas veces sin prestarle atención a lo que esta a nuestro alrededor. 
Pero de repente, alguien esta viniendo frente a nosotros, camina al mismo ritmo, utilizando la misma distancia entre los pies. Ves su mueca, de esas que no demuestran nada, pero es en ese instante en donde las miradas se cruzan. 
Puedo ver sus tristezas y sus alegrías, sus deseos, sus sombras, sus luces. Los imagino trabajando, en la escuela, en sus casas. Los imagino hablando, llorando, riendo. 
Y luego de ese medio minuto que ud pasó por mi lado, pude conocerlo/a. Tal vez no nos crucemos más mientras caminemos, o tal vez sí, pero no reconoceré su rostro entre miles de rostros que he visto. Pero lo/la he conocido con solo un vistazo a su mirada, con solo concentrarme en lo que ud ve con esos ojos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario