lunes, 28 de noviembre de 2011

Una más, solo eso... ( relato )

-Digan "wisky" -dije antes de disparar el flash de mi querida compañera, de mi querida cámara. -Listo -dije mirando la pantalla de mi amiga, mientras veía un grupo de personas sonriendo para ella. 
¿Cómo era posible que tanta gente le dedicara sonrisas? Siempre ame la fotografía, ¿por qué? Pues por la magia que hay en ella, las fotos son recuerdos, imágenes vivas de algo que paso. 
Saludé a los chicos que se iban de allí mientras me dirigía a mi compañera de trabajo. 
-¿Cuándo hay que editar las fotos? -pregunté mientras un mar de niños corrían por aquí y por allá. 
-Para el miércoles -levantó su vista de su celular, aquel que no dejaba nunca -¿Terminaste? -preguntó algo aburrida. Asentí levemente, y luego miré a los alrededores en busca de otro momento inigualable que mereciera ser fotografiado, pero solo había pequeños jugando y mostrando sus risas relucientes. 
-Ok, nos vamos... me cansé de esto -dijo mientras se dirigía a la salida del pelotero, yo saludé a la madre del cumplañero. 
Me subí a la camioneta de la empresa y mi compañera Nerina apretó el acelerador para salir inmediatamente de allí. 
-Escucha... hoy salgo ¿sí? Te quedarás en la empresa editando tú -me miró picarona, ella y sus novios. Si novios en plural porque cada día salía con uno distinto. 
-Pero... -quise quejarme pero me callé de inmediato, sabía que era en vano. Hoy sábado lo que querría hacer toda chica es salir, pero yo, yo no soy cualquier chica... yo me dedico a esto. -Ok -dije mientras miraba por la ventana el hermoso atardecer, mientras me hundía en mis pensamientos. 
Quisiera volver a verle, volver a decirle lo mucho que lo quiero y lo admiro... pero sé que jamás podrá pasar. Fernando es parte de mi pasado y por mucho que odie romper fotos, debí hacerlo... él ya no era parte de mi y no quería recordarlo. Aquel modelo del cual me enamore en un tiempo, fui solo para él pura diversión. Una joven fotógrafa con la cual pudo tener sexo un par de veces, una pequeña lágrima me delató y mi acompañante hablo. 
-Deja de pensar en él, ahora se debe estar pudriendo en algún lugar de Australia -la miré y sonreí, algo falsa pero logré tranquilizarla, seque la pequeña lágrima y me dispuse a ver por la ventana. 
Pero algo llamo mi atención, un anunció al costado de la carretera, lo miré detenidamente. Era él, Fernando posando para otra cámara que no era la mía, con su sonrisa ardiente y su cuerpo tan... sacudí la cabeza para sacar aquellos pensamientos de mi mente y lo logré, encendí la radio y me dispuse a escuchar algo de música por el resto del trayecto. 

-¿Me veo bien? -preguntó Nerina como por milésima vez, yo la volví a mirar y le sonreí, ella era una rubia verdaderamente hermosa ha decir verdad y la ropa que usaba remarcaba bien sus curvas, ademas de que sabía combinar los colores a tal punto de hacerla vez aún más linda. 
-Que te ves bien! -dije y ella soltó una pequeña risita -Ese chico se va a morir al verte, a ver si llega a la cama -estallamos en carcajadas y luego esta tomo su celular que estaba vibrando, un mensaje de aquel chico avisando que se encontraba en la puerta de la empresa. La salude y le desee suerte para luego verla desaparecer por el ascensor. 
Volví mi vista a mi pequeña computadora, viendo una vez más las fotos que debía editar. Esta era mi vida, para esto había dedicado horas de estudio... lo amaba, amaba hacer esto... pero quería algo diferente. 
Me concentré en un par de fotos que necesitaban retoques de luces y efectos, la calidad era lo más importante, por eso se destacaba la empresa. 
Hacía ya unos meses que me asignaron los eventos, pero hace un tiempo hacía fotografías artísticas, con personas o sin personas... para publicidades y demás. Era muy reconocida en el medio, y amaba sacar diferentes fotos que demostraban tanto, pero luego de lo que paso con él... no quise hacerlo, no podía... 
Escuche unos pasos en el piso, yo estaba encerrada en mi oficina y a juzgar por la hora sabía que nadie podría estar allí. Miré un poco por la ventana que daba al pasillo, pero no vi nada, solo luces apagadas; volví mi vista a las fotos, acomodándome en mi asiento para seguir con mi trabajo. 
-Auch! -un pequeño grito me saco de mi burbuja personal, me asusté, había alguien allí. Miré a todos lados y me levante lentamente, tome en mis manos una abrochadora de metal... ¿con algo debía defenderme no? Caminé con cuidado hacía la puerta de madera, algo atemorizada. La abrí un poco y logré escuchar como movían cosas... ¿ladrones? Si por supuesto, y esto me viene a pasar a mi. 
Tomé una bocanada de aire armándome de valor para enfrentar con lo que tenga que enfrentarme, abrí la puerta bruscamente y di un pequeño salto para salir. 
Mis ojos se abrieron como platos al ver a una persona tan... perfecta ante mi, si este era el diablo quería quemarme en el infierno con él. Se dio media vuelta al escucharme y sus ojos color esmeralda se posaron en mi cuerpo, algo que me hizo estremecer... sus ojos me desnudaban por completa, y su cabello alborotado y mojado lo hacía ver tan sensual. Su camisa negra pegada al cuerpo mostraba un cuerpo bien formado, por un momento me imagine yo acariciando su pecho. 
Me refregué los ojos, esto debía ser un sueño, pero no... él estaba ahí, aquel dios griego que me miraba fijo y me dedicaba una hermosa sonrisa blanca. Como boba sonreí y deje caer la abrochadora al ver como se acercaba a paso lento hacía mi oficina. 

-Así que... alguien saco fotos que no te gustaron y por eso viniste? -pregunté mientras bebía de mi tasa de café, y lo miraba fijamente, él asintió. 
-¿Tengo qué creerte? -pregunté algo divertida, él se acercó a mi con su silla. 
-Pues... si -susurró en un tono que me hizo estremecer, aquel muchacho me hacía sentir cosas inexplicables. Se alejó y se apoyo en el respaldo de la silla aún sin desviar su vista de mi. -No encuentro en este lugar, alguien que pueda... complacerme -alzó una ceja -¿Y tú? -preguntó. Deje mi café de lado y lo miré a los ojos. 
-Yo me dedico en la parte de eventos... deberías venir mañana y... -me interrumpió. 
-Pues, las fotos que vi de Fernando no demuestran lo mismo -lo miré sorprendida, ¿de dónde lo conocía? -He averiguado todo de ti -mis ojos se abrieron completamente... ¿esto era una broma de Fernando? 
-¿C...ó...mo? -tartamudeé de lo nerviosa que estaba. 
-Si, Lara... quiero que tú me saques las fotos. -

-Ahora... acomódate por ahí, entre las telas -dije mientras me dirigía a verificar que mi equipo este en el estado adecuado, encendí las luces y las puse en los lugares correspondiente. Me di media vuelta preparada para sacar las fotos que él tanto quería. 
-Bueno, ¿estoy bien así? -levante mi vista hacía arriba, y ahí estaba el hombre perfecto, mis ojos no creían ver aquella imagen tan... sexy. 
-Ssssi -logré decir algo agitada, tenía su camisa abierta y por culpa del ventilador que había encendido su pelo bailaba con el viento, haciendo que se vea sumamente sensual. 
Comenzó haciendo poses, mientras los flashes salían disparados de mi cámara una y otra vez. El aire del lugar se hacía cada vez más caliente, a medida que pasaban los minutos y yo no podía más seguir allí viendo tan perfecto cuerpo y sin poder hacer nada. 
-¿Me permites una foto contigo? -preguntó algo picarón, yo asentí algo embobada y puse el temporizador, apreté el botón y me dirigí a su lado. El me tomo de la cintura y me acercó a su cuerpo ardiente, mis manos quedaron pegadas a su pecho y nuestros labios se estaban rozando. Una luz brillante se disparo al paso de diez segundos, sus labios chocaron con los míos algo desesperados y otro flash anunció la segunda foto. Sus labios se posaron rápidamente en mi cuello y otro flash que hizo que se alejará de mi con una sonrisa en su rostro. 
-Ok, ¿terminamos? -pregunté algo agitada. El negó. 
-Otras más... -fue directo a mi cámara y puso el temporizador, se dirigió corriendo hacía mi y me levanto haciendo que yo enredara mis piernas en su cintura mientras nos dábamos un beso desesperado, esperado por los dos; un flash anunció que la foto había sido tomada y de un momento a otro yo me encontraba en el piso y él encima de mi con sus labios esta vez en mi cuello y sus manos todavía en mis piernas, segundo flash y saqué desesperada su camisa mientras otra vez nuestros labios se encontraban, y él acariciaba mi piel bajo la blusa, tercera foto y última. Se separo algo agitado y yo lo miré a los ojos deseosa de más. 
-Una más... solo eso -

Te pienso y las lágrimas no tardan en salir, te extraño... no puedo estar en tu casa sin acordarme de vos, de las cosas que hacíamos. Se me hace muy duro estar ahí con tu hermana, y que vos no aparezcas para gritarnos. 
El silencio que se vive en esa casa desde que te fuiste es inmenso, todos te extrañamos, pero más tu familia. 
Veo como tu hermanita sufre en silencio, y no lo puedo permitir, quiero hacer lo que este a mi alcance para verla feliz... pero sé que no puedo, porque le falta una parte de su vida, y con eso no se puede hacer nada. 
Solo te pido primo querido que de donde estés, nos cuides pero más ella que te necesita... 

viernes, 25 de noviembre de 2011

Te quiero

Te quiero más de lo que se puede querer a una persona, te quiero más de lo que alguien se podría imaginar. Te quiero mucho más de lo que piensas, te quiero por ser así, como sos. Diferente, imperfectamente perfecto. 
Sos la única persona capaz de hacerme feliz, la única capaz de hacerme desvelar todas las noches y de llorar días por vos. 
¿Cómo lo haces? No sé, hay algo ... ahí, en vos, que hace que seas importante. 
Me robaste el corazón, y no pretendo que me lo devuelvas ... solo te pido que me des el tuyo. 

Entiende...

Las cosas suceden sin previo aviso, por más que tratas de evitarlo, llegan y por arte de magia se apoderan de tu vida. 
Eso es lo que me paso a mi, me llego, de la nada... y sin las condiciones adecuadas; trate de alejarme una y otra y otra vez... ¿Crees que funcionó? No, para nada. Hizo que me sintiera peor, mi corazón se rompía una y otra vez en mil pedazos. Trate de rearmarlo, me salió a medias, pues una parte de mi corazón se había ido. 
Estoy feliz de tenerte, si, pero hay algo que me falta y que no me deja dormir por las noches. 
Cuando decís no, yo digo no, y cuando decís si digo si. No, me tengo que hacer valer por mi misma, quiero ser feliz en serio ¿qué importa lo que digan los demás? Nada. ¿Pero si lastimo a alguien? Quiero que esto se acabe y cuando pensé que todo había acabado me di cuenta que volvía a comenzar. 

jueves, 24 de noviembre de 2011

Vos...

¿Qué más puedo decir? Si has robado mi corazón para dejarme aquí, sin nada, a la espera de tenerte. Con el tiempo en mis manos, que no pasa... el tic tac del reloj lo hace más lento. 
¿Qué puedo hacer? Si hace ya mucho tiempo que mi vida sos vos, solamente vos. No hay nada en mi mente y corazón más que tu nombre. 
He sufrido mucho por vos, he derramado demasiadas lágrimas que no podrías ni contarlas. Me he encerrado en mi misma, solo porque vos, no estabas acá, conmigo. 
¿Cómo es qué una persona se vuelve de repente tan importante para una? 
No lo sé, pero vos lo hiciste. Tomaste mi corazón y mi alma, para dejarme sola sin nada. 
Pero algo mágico paso, algo que todavía no puedo entender. Regresaste y con ella mi alma y mi corazón, te extrañe... 
Ahora me encanta saber que puede existir en algún futuro, un nosotros. 

lunes, 21 de noviembre de 2011

Dame una razón

Dame un razón para quererte, una razón para creerte. 
No quiero volver a caer en tus trampas, prometo no volver a tus brazos. 
Cuando llegue el día en poder decirte ya no te quiero seré feliz, porque al saber que no eres más importante para mi, seré libre. 
No puedo amarte, no quiero amarte.... 
¿Cuándo lo vas a entender? 
Ya te llevaste mi vida, siendo vos la única persona importante en ella... no volverá a pasar. 

viernes, 18 de noviembre de 2011

No quiero que sea así

¿Qué paso? Hace unos meses ademas de ser mi mamá eras como mi mejor amiga...  a la que sabía que podía contarle todo y no iba a juzgarme, sino entenderme y apoyarme... aconsejarme. 
¿Dónde quedo eso? Te cuento algo, y me juzgas ... no me crees, me tratas de mentirosa. Ya no hablamos como antes, es más, prácticamente ni hablamos. 
¿Por qué?
Me duele que me trates así, indiferente... vos por un lado y yo por el otro. No puedo, no quiero... 

Antes me dejabas salir, me premiabas con salidas, ahora... nada. Una vez por semana como mucho. ¿No confías más en mi? 
Ya no sé donde quedo aquella relación, ahora solo sos... mi mamá, y no LA MEJOR MAMÁ, como siempre... una mamá común y corriente. 
Te extraño... 

lunes, 14 de noviembre de 2011

En mis sueños

Aunque sea en mis sueños soy feliz con tu presencia, te tengo en mi vida y no planeo dejarte ir aún. Te necesito, necesito sentir tus labios, tu caricias y tu voz. 
En mis sueños somos felices, y todo lo que dices es cierto, es la pura verdad. Nos amamos y no hay un final. 
Como me gustaría que ese sueño sea real, pero la realidad es todo lo contrario a lo que yo suelo imaginarme. 
En mi realidad, debo alejarme del peligro que es quererte. 

Amores que no se olvidan ~Relato~


El mundo giraba en torno a los chicos, al amor, a ese nuevo mundo que recién se da a conocer. A esa edad todo parece nuevo, desde una mirada, hasta un beso. Hasta que te acostumbras y lo nuevo se vuelve aburrido monótono y tal vez inexistente. 
Así estaba yo a los trece años, creía cualquier cosa que veía, y lo que veía y escuchaba para mi, era sagrado. No había nada mejor que un chico, que un beso, que una mirada o un gesto. Que él por acá, que él por allá. Tomaba todo a pecho, y me dolía en el alma por más estúpido que sea el golpe. 
No solo yo era sí, sino todas y cada una de mis amigas y creo que aún lo siguen siendo ya que no pueden dejar esa pre-adolescente que recién descubre el mundo del sexo opuesto. Pero solo una cosa me hizo aprender que no se debe tomar todo a la ligera, que las palabras van de la mano con las acciones, sino no tienen valor alguno. 

Si tan solo lo hubiese conocido un mes antes, la historia tal vez sería distinta... pero de cada cosa se aprende, y yo con esto aprendí mucho. 
Todavía recuerdo las primeras palabras que nos dijimos... los primeros "holas" y las primeras miradas, esa primera sensación de placer al verlo pero al mismo tiempo de culpa, mucha culpa. ¿Cómo alguien puede sentir esas dos cosas a la vez? Pues solo alguien que se atreve sentir, algo que no debía. 
Al comienzo pensaba que era todo una mala jugada, que era mi culpa o tal vez la de él ¿o la de ella? No lo sé, solo sabía el cariño que irradiaba mi cuerpo y que él era perfecto para mi. Pero... ¿lo era? No lo sé, algún día lo sabré. 
Deje de hablarle, por más que me duela en el alma debía tomar una decisión, lo hice... sufrí muchisimo. Más de lo que debería haber sufrido. ¿Qué lo extraño? No lo niego. 
Jamás supe que era ese lazo tan fuerte que me unía a él, si era amor, obsesión ¿o qué? 
Supe que él no era el hombre perfecto, pero que habíamos nacidos para estar juntos... por eso tantos encuentros y desencuentros. Por eso tanta locura, y por eso tanto dolor. 
Creí y sigo creyendo que en algún momento de nuestras vidas lo lograríamos, estaríamos juntos sin nada ni nadie que lo impida, sin dolor y sin hacernos sufrir mutuamente... 
Solo sé que al final del camino, nuestras manos se entrelazaran para emprender un nuevo y asombroso viaje por descubrir juntos. 


Me escapo

Tengo ganas de escaparme y que no me vean más, ser libre y volar por donde quiera, sin tener que pedir permisos ni depender de nadie ... 

miércoles, 9 de noviembre de 2011

No sé

¿Tengo que creerte? No sé , no puedo creerte... muchas cosas hicieron que ya no te crea, muchas cosas que dijiste y que dije. No puedo volverme a imaginar algo con vos, me hes imposible... por más que quiera, no puedo. 
Me dicen cosas de vos, que es difícil no escuchar. Pero que hago? Te escucho a vos o a los otros ? 
No sé 
Cuando te pedí en preescolar, ser amigas nunca pensé que iba a durar tanto, cuando te conocí hace 10 años, no pensé que te iba a querer tanto... pero tus acciones y nuestras locuras, hicieron que pronto ocupes un gran lugar en mi corazón. 
Vas a cumplir quince, la edad favorita de toda mujer. Todavía me acuerdo cuando con las chicas hablábamos de esto, a vos no te gustaba para nada! Pero ahora, creo, lograste entender el significado de cumplir esta edad. Ayer en la escuela te dice: "No puedo creer que ya vayas a cumplir los quince cuando yo te conocí tenías cinco añitos" 
Siiiiiiiiii , que chiquita! 
Hay hermosa mía y de mi corazón , hoy cumpliendo quince años, te convertís en mujer... te amo mucho !!!!!!!!!!
Ah y otra cosa.. 
Feliz cumple!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

lunes, 7 de noviembre de 2011

Siempre presente...

Primo mío, cuantas cosas vivimos juntos, cuantas risas y cuantas puteadas, cuantos gritos, cuantos cantos... Es muy raro juntarnos en familia y que vos no estés ahí... 
Hoy ya hace un mes que te me fuiste, pero yo te sigo viendo en mis recuerdos y en mis sueños... porque es muy difícil de olvidar a una persona como vos. 
Tu viaje, me pego fuerte... 
Primo de mi corazón, te voy a llevar por siempre dentro mío de tal manera que tu ausencia no se note, porque siempre vas a estar presente... 

domingo, 6 de noviembre de 2011

Te vi ...

Te vi en mis sueños, fue uno de los más lindos, tan real más de lo que podrías creer. 
Juro que verte, aunque sea así, me hizo bien. Me llevabas de la mano a uno de los momentos más felices de mi vida, y me hablabas al oído mientras te reías. 
Nunca fuimos así, pegados, eso fue lo que más me sorprendió del sueño. 
Pero entendí que en ese sueño me dejaste un mensaje, sí loco lo que digo, pero yo lo siento así. 
Estando ahí, a mi lado, me dijiste de alguna manera que siempre vas a estar junto a mi, que no preocupe que vas a caminar a mi lado. Y juro que por primera vez al acordarme de vos en este largo mes, en el que estamos sufriendo tu ausencia, tuve una sonrisa y no lágrimas. 
Gracias por hacerme entender que tengo que recordarte con felicidad. 



viernes, 4 de noviembre de 2011

Una película

Una película te gusta, te atrapa... te emociona, te hace llorar, te pega y te hace pensar. 
A mi me hizo pensar; me encanto, me encantan las películas que te dejan enseñanzas fuertes, para pensar durante largos ratos. 
Esta me hizo entender que las cosas hay que valorarlas cuando las tenes, y disfrutarlas, sea como sea y pase lo que pase. Tratar de mantener viva la llama del amor, aunque haya errores por parte de alguien, tratar de que no se apague.