La mayoría de las veces que pienso en vos, me nacé esa duda existencial que en realidad todos tenemos. ¿Dónde estarás? ¿Será que estás repartido en el espacio, entre todos tus seres queridos? ¿Será que estás perdido en el tiempo, en un manojo de recuerdos? ¿Será que tu alma anda vagando por distintos paisajes, conociendo nuevos lugares? ¿Será que te has elevado? O tal vez puede que estés en una estrella, que tu luz se concentre en una de ellas, que seas nuestro guía, nuestro ángel.
No sé donde estás, no sé que fue de vos, de tu luz, de tu energía, de tu alma; pero de lo que sí estoy segura es que seguís estando. Vivís mientras nosotros te demos vida, mientras te recordemos, mientras te tengamos presente. Vivís en cada momento importante.
Por eso hoy, primo querido, me atrevo a decirte: Feliz cumpleaños.
Porque así sea en nuestros recuerdos, en el espacio o en el tiempo, hoy, cumplís 19 años.
Y en estas fechas llegan los recuerdos, retrocedemos y urgamos en nuestra memoria. En esta fecha trato de escuchar aunque sea en el viento, tu suave voz diciendo "gracias" y ríendo. Trato de ver, aunque sea en el cielo, tus ojos brillando.
Trato de aferrarme a vos, a través de esas cosas. Es que hoy, después de un año y tres meses, todavía no quiero aceptar que ya no estás, porque como he dicho antes, seguís estando.
Te quiero Imanol, muchisimo.
No sé donde estás, no sé que fue de vos, de tu luz, de tu energía, de tu alma; pero de lo que sí estoy segura es que seguís estando. Vivís mientras nosotros te demos vida, mientras te recordemos, mientras te tengamos presente. Vivís en cada momento importante.
Por eso hoy, primo querido, me atrevo a decirte: Feliz cumpleaños.
Porque así sea en nuestros recuerdos, en el espacio o en el tiempo, hoy, cumplís 19 años.
Y en estas fechas llegan los recuerdos, retrocedemos y urgamos en nuestra memoria. En esta fecha trato de escuchar aunque sea en el viento, tu suave voz diciendo "gracias" y ríendo. Trato de ver, aunque sea en el cielo, tus ojos brillando.
Trato de aferrarme a vos, a través de esas cosas. Es que hoy, después de un año y tres meses, todavía no quiero aceptar que ya no estás, porque como he dicho antes, seguís estando.
Te quiero Imanol, muchisimo.